Un réel pour le XXI sciècle
WORLD ASSOCIATION OF PSYCHOANALYSIS
IXth Congress of the WAP • 14-18 april 2014 • Paris • Palais des Congrès • www.wapol.org

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Jésus Santiago
Interview on the theme « A Real for the XXIst Century »
by Ana Lydia Santiago

ALY: ¿El título del Congreso: Un real para el siglo XXI , que le evoca?

JS: Destaco como marca principal de este título la presencia del artículo indefinido Un, para designar lo real. El uso de ese Un, a mi forma de ver, no debe ser entendido como la designación de algo impreciso o vacío. Al contrario, quiere decir que lo real que se desprende del psicoanálisis, y que ofrecemos al siglo XXI, es un real singular. Esta singularización es diferente, por ejemplo, del modo como Lacan comprendía lo real, al inicio de su enseñanza, como aquello que retorna siempre en el mismo lugar. Lo real es singular porque es Un. El equivalente por lo tanto, de este real para el siglo XXI contingente, es el aforismo de Lacan "Hay-Uno". Este real es Un, porque se muestra separado del orden simbólico, del campo del Otro. En verdad, es eso que permite decir – Jacques-Alain Miller comentará eso a lo largo de sus cursos – , que ese real es sin ley, y por lo tanto no está sometido a las leyes del lenguaje y tampoco es regulado por el sentido.

ALY: Ese real no regulado por el sentido, contingente, es útil para la práctica actual del psicoanalista?

JS: Ciertamente. Él aparece no solamente como un factor culminante de la propia experiencia analítica, en cuanto resto indescifrable, resto que se desprende de las repeticiones del sujeto, que son impermeables a la interpretación analítica. Sino que también aparece en aquello que nos llega en nuestros consultorios, como formas de síntoma, que exigen mucho más un saber-hacer con el goce presente en las repeticiones de un sujeto, de que propiamente un goce pasible de interpretación y desciframiento, como dije antes. En verdad, esta dimensión indescifrable del goce de un síntoma es decisiva para la práctica del psicoanalista en la contemporaneidad. Diría inclusive, que ese goce se manifiesta y se configura, en el tratamiento analítico, en función de un cuerpo vivo, de un cuerpo que solamente habla a partir del goce, lo que es diferente de considerar que el cuerpo fala.

ALY: ¿Esta manera de concebir el goce, contribuye para la lectura de las manifestaciones de masas contemporáneas, que estamos teniendo en la actualidad?

JS: Considero bastante instructivo considerar las manifestaciones des este real contingente en ámbito de los fenómenos de masas, particularmente aquellos que se muestran causados por las realizaciones imprevisibles de la ciencia. Sabemos que en nuestros días, no podemos considerar los efectos de la ciencia apenas por la estrategia de forclusión del sujeto. Es preciso tomar en cuenta que, en el ámbito del discurso universal, la ciencia se presenta también a través de manifestaciones que son manifestaciones al azar. No siempre tenemos el control, la capacidad de programar los efectos de la ciencia. Pienso que tomando en cuenta este real, podemos comprender las manifestaciones de jóvenes que ocurrieron recientemente en Brasil. Estas manifestaciones resultaron de efectos imprevisibles del uso de las redes sociales, estimuladas por gadgets de la ciencia. Quien podría imaginar que una generación de jóvenes completamente adherida a la lógica consumista, propia del nuevo espirito del capitalismo, podría surgir en la escena política de Brasil, con proposiciones marcadas por una lucidez de alcance inestimables para los rumbos de la vida política brasileira.

ALY: ¿Este Un propio de lo real contingente es también lo que genera desorden en la vida civilizada?

JS: Sin duda. Creo que no se comprende la desorden en lo real sin la clínica del Hay-Uno, del Hay-goce. Es a través de este Hay-Uno que podemos comprender en estos fenómenos, algo más allá de las configuraciones clásicas que conocemos a partir de la Psicología de las masas y de la interpretación freudiana de estos fenómenos basados en las identificaciones de los miembros de estas masas o de estos grupos entre sí, con un líder. En este caso, podemos claramente decir que es lo real contingente que permite dar cuenta por ejemplo, de que el bigote de Hitler no es un rasgo identificatorio. Hay en él, algo de un plus de goce particular. Solo comprendemos el individualismo de masa presente (en las manifestaciones de los jóvenes) en estos días, tomando en consideración una política del síntoma que se esclarece por medio de ese real contingente.

ALY: Entonces en estas manifestaciones hay multiplicidad, pero también hay singularidad.